En la comunidad de Unión de Olivos, ubicada en Mapastepec, un grupo de 18 familias ha estado cultivando su futuro desde hace 11 años a través de la cooperativa Productores de Café Tierra Sagrada. Este proyecto, que busca fortalecer la producción local de café, se ha enfocado en eliminar los intermediarios, permitiendo así a los productores obtener ingresos más justos y directos.
Calidad y tradición en cada taza
El fundador de la cooperativa, Heimar Velásquez Mazariegos, compartió que Tierra Sagrada se extiende por 180 hectáreas, donde se cultiva café arábiga, específicamente las variedades Típica y Bourbon. Velásquez subrayó que la calidad del café se logra a través de un meticuloso proceso que incluye el control de maleza, poda y fertilización.
“Un 35% de la calidad del café proviene del corte selectivo de la cereza”, explicó, añadiendo que el objetivo es resaltar la dulzura natural del grano, comparable a la de una fruta fresca.
Éxito en competencias nacionales
La cooperativa ha hecho un nombre en el mercado nacional de café de especialidad, proveyendo a restaurantes y cafeterías en todo México. Desde 2018, han participado en el concurso Premio Expo Café, que se lleva a cabo en las ciudades de México y Guadalajara, donde se presentan muestras de productores y tostadores de café.
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Este año, Tierra Sagrada envió 500 gramos de su producto entre 744 muestras evaluadas, logrando un destacado tercer lugar a nivel nacional.
La historia de Tierra Sagrada es un ejemplo inspirador de cómo el trabajo en equipo y el enfoque en la calidad pueden transformar el panorama de la producción de café en México, abriendo puertas a nuevas oportunidades para las comunidades rurales.
