La Línea K del Tren Interoceánico es uno de los mega proyectos de la actual administración de la presidenta Claudia Sheinbaum.
A través de este proyecto se busca potenciar la zona sur de México y convertir a Tapachula en uno de los centros económicos más importantes no solo de esa área del país, sino de Centroamérica.
Esta iniciativa prevé reformar la línea férrea que corre por nuestro país conectando Ixtepec, Oaxaca, con Ciudad Hidalgo, Chiapas.
Línea K, un proyecto que reformará Chiapas
No solo conectará Oaxaca con Chiapas en un tiempo récord ya que en automóvil el camino es de seis horas y 37 minutos aproximadamente. Si bien todavía se carece de una estimación oficial, las autoridades reconocen que el tiempo será menor.
Con una extensión total de 449 kilómetros, es que este proyecto se perfila como uno de los más importantes en la región sur-sureste.
Su construcción, en la que está contemplada la realización de 427 puentes y 613 obras de drenaje en su primera fase, conectará a Ixtepec, Oaxaca, con Ciudad Hidalgo, Chiapas.
El proyecto de la Línea K en el sureste de México tiene un avance en cada uno de sus tramos, siendo el de Tonalá a Huixtla el que debería terminarse primero, dado que su entrega estaba prevista para 2024. Los dos restantes están programados para 2025.
Gracias a los trabajos que se derivan del esfuerzo del corredor interoceánico es que se potencia a todas las comunidades que lo circundan, además que se busca que conecte también con Belice y Guatemala a través de una extensión.
La obra está a cargo de la Secretaría de Marina y fomentará la construcción de Polos de Desarrollo para el Bienestar a lo largo de su construcción.